Longevidad

Hoy en día, en las sociedades occidentales, casi todo el mundo vive más de 65 años; lo suficiente como para que se manifiesten las consecuencias para la salud de la genética y del estilo de vida. Vivir más afecta a muchos parámetros de la sociedad, tanto actual como futura. Impacta en la salud, en la educación, en la forma de gobernar e incluso en la ética.

Continuación analizamos qué es longevidad.

El envejecimiento de la población es uno de los grandes retos a los que se enfrenta el mundo. Su importancia es igual, si no mayor, a la de la lucha contra el cambio climático o la de las amenazas mundiales como la proliferación de las armas nucleares. Es cierto que para la mayoría de la población mundial el aumento de la longevidad es una muy buena noticia. Sin embargo, este fenómeno también conlleva implicaciones para el mercado laboral, la salud y los sistemas de protección social.

El aumento de la longevidad ha llegado para quedarse y todo parece indicar que la esperanza de vida vaya a seguir aumentando o, al menos, mantenerse.
Lejos de ser un drama, como lo ven aquellos que, en un alarde de discriminación por edad más o menos consciente, hablan del tsunami gris, el aumento de la longevidad supone un desafío y también todo un campo de cultivo para nuevas oportunidades. Las personas más mayores ya tienen mucho que decir, y el crecimiento exponencial de este grupo de edad hace que sólo se pueda prever un mayor protagonismo por su parte.

Los expertos del Future Trends Forum debatieron sobre las actividades e iniciativas que debemos de poner en marcha cuanto antes para asegurarnos el equilibrio y bienestar de un mundo cada vez más longevo.