¿Es posible crear máquinas que sientan?

Resumen generado por IA

La Fundación Innovación Bankinter organizó un ciclo de conferencias online para explorar avances en neurociencia y su impacto en la comprensión humana y la tecnología. En el primer webinar, “Máquinas que sienten”, el neurocientífico Antonio Damasio presentó sus investigaciones sobre la posibilidad de crear máquinas que emulen emociones, conciencia e inteligencia, y que puedan ser empáticas. Damasio explica que, a diferencia de los robots actuales, que solo ejecutan tareas programadas sin sentimientos, estas nuevas máquinas podrían incorporar vulnerabilidad y “preocupación” por su propia existencia, lo que les permitiría adaptarse, evolucionar y reaccionar a su entorno de manera consciente.

Para lograrlo, Damasio propone utilizar el concepto de homeostasis, propio de los seres vivos, aplicado a la robótica blanda, que cuenta con sensores, actuadores y capacidad de deformación. Estos robots blandos, gobernados por machine learning, podrían autorregularse y eventualmente desarrollar “homeostasis social”, es decir, empatía hacia los humanos. El principal desafío es crear sistemas computacionales que integren sensorización, conocimiento y razonamiento para lograr esta nueva generación de máquinas sensibles. Estas ideas están desarrolladas en el artículo “Homeostasis and soft robotics in the design of feeling machines” publicado en Nature. El informe completo y más recursos están disponibles en el Future Trends Forum de la Fundación.

El neurocientífico Antonio Damasio nos cuenta su última investigación sobre la posibilidad de crear máquinas que sientan, que emulen la conciencia y la inteligencia e incluso ser empáticas.

Máquinas que sientan como los humanos. ¿Existirán? Con motivo del lanzamiento del informe «Neurociencia: más allá del cerebro», desde la Fundación Innovación Bankinter hemos organizado un ciclo de conferencias online para conocer, de la mano de los expertos que han participado en su elaboración, las principales áreas de trabajo de la neurociencia y cómo esta ciencia puede ayudarnos a conocernos mejor, mejorar nuestras capacidades o curar nuestras enfermedades.

En el primer webinar, “Máquinas que sienten”, celebrado el 6 de mayo, hemos contado con el neurocientífico Antonio Damasio, Profesor de la cátedra David Dornsife de Psicología, Neurociencia y Neurología en Universidad del Sur de California, Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica y patrono de la Fundación Innovación Bankinter.

En el webinar, Damasio expuso sus últimas investigaciones sobre sentimientos y robótica: cómo podría ser una nueva clase de máquinas que pudieran sentir, emular la conciencia y la inteligencia y, en definitiva, ser empáticas.

Es decir, se trata de la intersección entre un aspecto fundamental del ser humano –emociones, afectos y sentimientos-, y la robótica:

  • El ser humano usa su intelecto, muy embebido en su propia naturaleza, de manera que responde al mundo en función de cómo se siente y de cómo siente al mundo que lo rodea.
  • Hasta ahora, los robots simplemente tienen una inteligencia que les permite realizar las tareas programadas, sin ningún tipo de afecto ni sentimiento.

Utilizando el concepto de homeostasis y de conciencia como base para su concepción de las máquinas “sensibles”, Damasio propone introducir la vulnerabilidad en los robots, como germen de los sentimientos.

Los seres humanos, como cualquier otra criatura viviente, tienen una “preocupación” por sus propias vidas. Damasio propone construir un tipo de máquina que tenga vulnerabilidades y esté en riesgo, de manera que pueda utilizar su inteligencia para reaccionar, tener adaptabilidad y evolucionar. Este tipo de máquina tendría conciencia, esto es, sentiría qué le está pasando y reaccionaría a esa sensación.

Existen nuevos desarrollos en robótica que podrían hacerlo posible. Son los llamados “robots blandos”: pueden deformarse, tienen sensores y actuadores y pueden tener estados más o menos viables. Gobernados con machine learning, estos robots tendrían su propia homeostasis: podrían tener emociones, sentir su propio estado y el estado exterior, auto-regulándose. Una evolución final podría ser hacia la “homeostasis social”, es decir, que pudieran tener empatía con los problemas del ser humano.

Las ideas expuestas por Antonio Damasio están recogidas con detalle en el artículo “Homeostasis and soft robotics in the design of feeling machines”, publicado por Nature.

Para nuestro experto, el siguiente gran reto para avanzar en esta nueva concepción de las “máquinas que sientan” serían los sistemas computacionales capaces de realizar la integración entre:

  • La sensorización,
  • el conocimiento y
  • el razonamiento.

Si quieres saber más sobre Neurociencia, puedes descargar el informe completo «Neurociencia: más allá del cerebro», y acceder a los vídeos de los expertos que participaron en el Future Trends Forum haciendo click aquí.